5.2 Enfoques operacionalizables de clases y estratos sociales

En el Capítulo 2 repasamos brevemente algunas de las teorías más importantes en el campo del estudio de las clases y la estratificación social. En este apartado nos enfocaremos en el proceso que dichos investigadores atravesaron para llevar las clases de la teoría a los papeles (o bien, a la computadora). De esta forma, nos preguntamos:

  • ¿Qué decisiones han tenido que tomar?
  • ¿Qué limitaciones han encontrado en el pasaje de la teoría a lo empírico?
  • ¿Qué variables utilizaron para llevar a cabo dicho trabajo? ¿Cómo las combinaron?
  • ¿Qué limitaciones presentan las propuestas en función de las fuentes de datos disponibles en Argentina?

Como veremos el trabajo de desentrañar las decisiones que llevaron adelante los investigadores en la elaboración de esquemas y escalas de estratificación social no siempre es una tarea sencilla, y depende en gran medida de las huellas y directrices que los propios autores han dejado en sus trabajos acerca de cómo generar dichos constructos. Algunos han elaborado anexos, trabajos o publicaciones específicas en donde han señalado cómo construir dichos instrumentos. Otros, en cambio, han sido más ambiguos en sus formulaciones metodológicas, generando que aquellos interesados en la utilización de sus enfoques elaboren esquemas aproximados.

En este sentido, proponemos un repaso de las principales decisiones, criterios y características que asumen las clasificaciones más utilizadas tanto a nivel internacional como nacional en el estudio de las clases y la estratificación social. Vale decir que esta revisión lejos está de ser exhaustiva de todos los enfoques, por esta razón, hacia el final de este apartado listaremos algunas referencias para quien desee explorar en otros formatos clasificatorios.

5.2.1 Esquemas internacionales

5.2.1.1 Esquema EGP

El esquema EGP (Erikson, Goldthorpe, & Portocarero, 1979) es uno de los más utilizados, tanto en términos internacionales como regionales, para el estudio de la estructura de clases como de la movilidad social. John Goldthorpe fue quien se encargó de popularizarlo a través de sus investigaciones, llegando a ser utilizado, a partir de una adaptación, por la European Statistical Office como clasificación oficial (European Socio-economic Classification) 4.

Según el autor, el esquema no debe considerarse como un mapa definitivo de la estructura de clases, sino como un instrumento de trabajo que puede sufrir cambios y modificaciones. En la construcción del mismo, intervinieron tanto ideas teóricas como consideraciones prácticas que dependieron del contexto en el que tuvo origen, de los propósitos y de la naturaleza de la información sobre la que sería aplicado (Erikson & Goldthorpe, 1992, p. 32).

En referencia a los criterios operacionales que implica la construcción del esquema, se consideran (Méndez & Gayo, 2007, p. 146):
1. la propiedad de los medios de producción,
2. la existencia y número de empleados (para aquellos que no son asalariados),
3. la distinción no manual – manual – agrícola, y
4. el tipo de relación de empleo (de servicios o relación contractual).

En la siguiente esquema se detallan los principales criterios de clasificación y la asignación de las clases.

Gráfico 5.1: Derivación del esquema de clases EGP. Fuente: Erikson y Goldthorpe (1992)

Derivación del esquema de clases EGP. Fuente: Erikson y Goldthorpe (1992)

De esta forma, la primera gran división ocurre a nivel de relaciones de producción, diferenciando entre empleadores (employers), trabajadores autónomos (self-employed workers) y empleados (employees). Para el caso de los empleadores se diferencia además según si presentan empresas grandes o pequeñas, así como por su rama de actividad (industria o agricultura), al igual que en los trabajadores autónomos. La operacionalización se complica al desagregar el mundo asalariado. Aquí interviene el criterio del tipo de relaciones de empleo.

La relación de servicio da lugar a lo que el autor denomina “clase de servicios” y que esta conformada por empleados profesionales, administradores y directivos. Los contratos suelen pautarse a largo tiempo y el modo de intercambio empleador-empleado suele ser difuso, en el sentido que no sólo actúa el salario como forma de pago, sino que también ciertos elementos prospectivos (aumentos, seguros sociales, pensiones, etc.) que garantizan la estabilidad y el sostenimiento del empleo. El empleado “de servicios” obtiene autonomía y discrecionalidad, dependiendo su rendimiento del “acuerdo moral” que existe con el empleador y no de sanciones externas. En contraposición, la relación basada en el contrato de trabajo, remite a lo que en términos agregados puede entenderse como “clase obrera”. A diferencia de la relación de servicio, los contratos suelen ser de menor término y se realiza un intercambio de dinero por esfuerzo, calculado en función de las horas trabajadas. La discrecionalidad y autonomía suelen ser bajas, ya que el rendimiento del trabajador está atado a una mayor supervisión sobre el mismo y a condicionamientos externos en forma de sanciones. En medio de ambos tipos ideales de relaciones, se encuentran las formas mixtas que dan lugar a las clases intermedias.

Por otro lado, las clases (identificadas en el gráfico anterior a partir de números romanos) pueden clasificarse de distintos modos, en función de cuán desagregada se desee presentar la información —Tabla 5.1—. A nivel de mayor desagregación, el esquema cuenta con 11 clases, sin embargo los autores han trabajado con colapsamientos de 7, 5 y 3 clases.

Tabla 5.1: Esquema de clases EGP

11 clases

7 clases

5 clases

I. Profesionales, administradores y oficiales de alto nivel; Directivos de grandes establecimientos industriales; Propietarios de grandes empresas

Clase de servicio (I + II)

Trabajadores de cuello blanco (I + II + III)

II. Profesionales, administradores y oficiales de bajo nivel; Directivos de pequeños establecimientos industriales; Supervisores de trabajadores no manuales

IIIa. Empleados de rutina no manuales de alto nivel (administración y comercio)

Trabajadores de rutina no manuales (IIIa + IIIb)

IIIb. Empleados de rutina no manual de bajo nivel (ventas y servicios)

IVa. Pequeños propietarios, artesanos con empleados

Pequeña burguesía (IVa + IVb)

Pequeña burguesía (IVa + IVb)

IVb. Pequeños propietarios, artesanos sin empleados

IVc. Agricultores, arrendatarios y otros trabajadores cuenta propia en el sector agrícola

Agricultores y arrendatarios (IVc)

Trabajadores agrícolas (IVc + VIIb)

V. Técnicos de nivel inferior, supervisores de trabajos manuales

Trabajadores calificados (V + VI)

Trabajadores calificados (V + VI)

VI. Trabajadores manuales calificados

VIIa. Trabajadores manuales semicalificados y no calificados

Trabajadores no calificados (VIIa)

Trabajadores no calificados (VIIa)

VIIb. Trabajadores agrícolas

Trabajadores agrícolas (VIIb)

Fuente: Erikson y Goldthorpe (1992)

Si bien existe bibliografía (Erikson & Goldthorpe, 1992; Rose & Harrison, 2007b) en la que se señalan algunos indicios sobre cómo operacionalizar el esquema EGP, no hay una forma directa y unívoca de realizarlo. Goldthorpe y Heath (1992) han realizado el ejercicio de operacionalización del mismo, pero para ser utilizado con la clasificación estandarizada de ocupaciones inglesa, que se diferencia tanto de la CIUO-88 como de la CIUO-08.

Comúnmente, los investigadores interesados en utilizar la clasificación han partido de una adaptación realizada por Ganzeboom para SPSS 5, a partir del clasificador ocupacional CIUO-88. Existe un paquete para R llamado ocuppar, que retoma la propuesta de Ganzeboom para ser utilizada bajo dicho programa. En el apartado siguiente, a modo de ejemplo retomaremos dicha propuesta de operacionalización.

5.2.1.2 Esquema de Wright

Como hemos señalado en el Capítulo 2, Wright ha presentado dos propuestas operacionalizables de clases, desde un enfoque neo-marxista: uno basado en las posiciones de las relaciones de clase y otro de las explotaciones múltiples. En este caso presentaremos los principales criterios abordados por el autor para el desarrollo de la segunda propuesta6.

Influenciado por el marxismo analítico, Wright identificó cuatro tipos de bienes de explotación posibles de ser relevamos empíricamente, y que se traducen en los diferentes tipos de derechos y poderes (recursos tangibles e intangibles) que tienen los sujetos en las relaciones de producción (Wright, 2005):

  1. Fuerza de trabajo (explotación feudal),
  2. Los medios de producción (explotación capitalista),
  3. Los bienes de organización (explotación estatal) y
  4. Las cualificaciones (explotación socialista)

De este modo, la combinación de esos cuatro tipos de bienes de explotación, permiten la generación de 12 posiciones de clase (Wright, 1994).

Ahora bien, ¿Cómo llega Wright a operacionalizar dicho esquema? En este sentido, el autor es bastante franco y sincero ya que explicita todas sus decisiones y limitaciones, señalando que de este modo “los que lo deseen puedan repetir los resultados que aquí hemos presentado, y hará también que nuestras decisiones operacionales queden lo más abiertas posibles a la crítica” (Wright, 1994). Esto es de vital importancia en el campo científico, en donde la posibilidad de reproducir los resultados realizados en distintos contextos de investigación.

Es necesario aclarar que para abordar la estructura de clases desde el enfoque propuesto por Wright se torna crucial realizar un relevamiento que recabe ciertos indicadores específicos vinculados directamente con el enfoque teórico del que parte el autor 7.

Por ejemplo, tomando una de las dimensiones más complejas a ser medidas como los bienes de organización, el autor construye dos tipologías (de toma de decisiones y de autoridad) y una categoría dicotómica de posiciones jerárquicas que derivan luego en una tipología de posiciones directivas, de acuerdo con la Tabla 5.2.

Tabla 5.2: Tipología de posiciones directivas

Variable input

Variable construida

Tipología de decisión

Tipología de decisión

Directivo o supervisor en la jerarquía formal de la organización

Tipología de posiciones directivas

3

3 o 4

1. Directivo según todos los criterios

3

3 o 4

No

2. Directivo fuera de la jerarquía formal

3

1 o 2

3. Directivo no supervisor

3

1 o 2

No

4. Decisor no supervisor fuera de jerarquía formal

2

3 o 4

5. Directivo-asesor según todos los critarios

2

3 o 4

No

6. Asesor fuera de la jerarquía formal

2

1 o 2

7. Asesor no supervisor

2

1 o 2

No

8. Asesor no supervisor fuera de la jerarquía formal

1

4

9. Supervisor sancionador

1

3

10. Supervisor de tareas

1

2

11. Supervisor nominal en la jerarquía

1

4

No

12. Supervisor sancionador fuera de la jerarquía formal

1

3

No

13. Supervisor de tareas fuera de la jerarquía

1

1

14. Sin subordinados pero en la jerarquía

1

1 o 2

No

15. No supervisor / no directivo según todos los criterios

Fuente: Wright (1994)

Finalmente la tipología de bienes de organización, permite discriminar a las personas en función de si son directivos, supervisores o no-directivos. Como pudimos ver, para llegar a esa tipología, distintas operaciones complejas debieron realizarse desde los indicadores relevados hasta la construcción de tipologías intermedias.

5.2.1.3 Propuestas gradacionales

Los enfoques de tipo gradacional son tributarios del paradigma estructural-funcionalista que ha orientado a las ciencias sociales durante gran parte de la mitad del siglo XX. Dichas propuestas sostienen básicamente que partiendo de las características atributivas (ingresos, estatus, prestigio), los individuos son posicionados en un continuum en el que las fronteras de clase se tornan difusas. A diferencia de los enfoques (neo)marxistas o (neo)weberianos, estas propuestas de medición ponen el eje en el carácter jerárquico de las ocupaciones, principalmente en función de la importancia de las mismas en relación al conjunto del sistema social, el prestigio y las recompensas materiales que se derivan de las posiciones ocupadas (Ossowski, 2003; Parsons, 1954; Wright, 1979).

En términos operacionales, estas gradaciones pueden constituirse de forma simple o sintética en función de cuantas variables intervengan en su determinación. Asimismo, los aspectos a medir pueden tener una naturaleza objetiva o subjetiva (Cachón Rodríguez, 1989). Sin embargo, su utilización en estudios internacionales, no sólo se explica por su fundamentación teórica, sino también por las ventajas metodológicas que su utilización implica. Por un lado, son escalas de medición con un gran nivel de estandarización, por lo que pueden ser utilizadas a partir de la información socio-ocupacional relevada en todos los países. Por el otro, su carácter continuo garantiza la aplicabilidad de diversas técnicas frecuentemente utilizadas como regresiones lineales, path analysis o análisis factoriales.

De esta forma, si bien existe un número importante de enfoques gradacionales de ocupación, señalaremos brevemente dos de los más relevantes: la Standard International Occupational Prestige Scale (SIOPS) de Treiman y el Internacional Socio-Economic Index (ISEI) de Treiman, Ganzeboom y de Graaf (Bergman & Joye, 2001; Francés García, 2009). Ambos toman a la ocupación como el indicador principal del posicionamiento en la jerarquía social, pero mientras uno mide el prestigio de las ocupaciones, el otro cuantifica el estatus socioeconómico de las mismas.

El primero de estos (SIOPS), hace referencia a las clásicas escalas de prestigio ocupacional que, basadas en indicadores subjetivos, relevaron el grado de aprobación y respeto que presentaba un set de ocupaciones para las distintas personas. Según Treiman, los puntajes de prestigio obtenidos eran similares entre distintos sectores poblacionales (ricos o pobres, jóvenes o viejos) y entre distintos países del mundo. El prestigo, de este modo, era un proxy válido de la importancia funcional que las ocupaciones presentaban en la sociedad. En términos operativos, dicha escala recopila las puntuaciones medias de prestigio de aproximadamente 60 países, utilizando como base la CIUO-68. A continuación —Tabla 5.3— presentamos, a modo de ejemplo, las puntuaciones de 20 ocupaciones seleccionadas, entre las 509 rankeadas en total (Treiman, 1977).

Tabla 5.3: Puntajes estandard ordenados de 20 ocupaciones seleccionadas a partir de la escala SIOPS

Ocupación

Puntaje estandard

Jefe de Estado

90

Oficial de policía de alto grado

75

Científico social

69

Ingeniero eléctrico

65

Osteópata

62

Empresario

58

Corredor de bolsa

56

Experto en huellas dactilares

54

Agente de ventas

51

Agente inmobiliario

49

Operador de garage

47

Fotógrafo

45

Ingeniero en locomotoras

43

Grabador de metales

41

Contratista agrícola

39

Músico de Jazz

38

Comerciante

36

Herrero

34

Cartero

33

Cajero

31

Sacristán

30

Reparador de bicicletas

28

Deshollinador

25

Sereno

22

Transportista de animales

18

Recolector de residuos

13

Fuente: Treiman (1997)

Como puede observarse dentro de las ocupaciones más prestigiosas se encuentran la de “jefe de estado” y “alto oficial de policía”, mientras que las de menos puntaje están el “recolector de basura” y el “transportista de animales”.

La otra familia de escalas continuas de ocupación pueden representarse a partir del ISEI. En tanto índice socioeconómico, es construido a partir de información objetiva, específicamente de la suma ponderada de información de ingresos y del nivel educativo. Una primera versión de los índices elaborados con este método es el Socio-Economic Index (SEI) elaborado por Duncan en 1961 sobre la estructura ocupacional de Estados Unidos (Blau & Duncan, 1967; Duncan & Hodge, 1963). En particular, el SEI se construía a partir de un análisis de regresión en el que se consideraba el prestigio ocupacional de 45 ocupaciones de 1949 como variable dependiente y los ingresos medios y el nivel educativo como variables independientes, controlando por la edad. De este modo, con los resultados de la ecuación se podían estimar los puntajes de estatus de todo el rango de ocupaciones de la fuerza de trabajo. Para su construcción, Duncan utilizó los títulos de prestigio ocupacional presentes en el estudio sobre prestigio (NORC) de 1947 de North-Hatt y el censo de Estados Unidos de 1950. En la Tabla 5.4 se resumen algunas de las ocupaciones que conforman el SEI y su puntaje estimado.

Tabla 5.4: Ranking ocupaciones según escala SEI. Ejemplos.

Intervalo de puntaje

Ocupaciones de ejemplo

90-96

Arquitectos, dentistas, ingenieros químicos

85-89

Ingenieros aeronáuticos,ingenieros industriales, gerentes de bancos

80-84

Profesores universitarios, editores y reporteros, ingenieros eléctricos

75-79

Contadores y auditores, químicos, veterinarios

70-74

Diseñadores, maestros, jefes de departamento

65-69

Artistas y maestros de arte, dibujantes, gerentes de ventas de vehículos

60-64

Bibliotecarios, instructores de deportes, administradores de correo

55-59

Directores de funerarias y embalsamadores, conductor ferroviario, propietario de tiendas

50-54

Clérigos, músicos y maestros de música, oficiales y admistradores públicos

45-49

Topógrafos, gerentes de talleres de automóviles, operadores de maquinarias de oficina

40-44

Propietario de transporte, cajeros, electricistas

35-39

Vendedores de comercio, encuadernadores, reparadores de TV y radio

30-34

Administradores de edificios, propietarios de gasolinerías, caldereros

25-29

Mensajeros, albañiles, yeseros

20-24

Mensajeros telegráficos, panaderos, choferes de autobuses

15-19

Herreros, carpinteros, pintores

10-14

Agricultores, zapateros, tintoreros

5-9

Vendedores ambulantes, conserjes, trabajadores de la construcción

0-4

Trabajadores de minas, porteros, trabajadores de molino

Fuente: elaboración propia en base a Blau y Duncan (1967)

Posteriormente, Ganzeboom, Treiman y de Graaf (1992) modificaron la ecuación de cálculo del SEI, considerando los efectos directos e indirectos de la educación, la edad y la ocupación sobre los ingresos, para elaborar el nuevo índice internacional. Asimismo, la construcción del ISEI implicó el uso 31 fuentes de información de 16 países entre 1968 y 1982. A diferencia de Duncan, estos autores no tuvieron en cuenta al prestigio de las ocupaciones durante la construcción del índice, que fue actualizado en dos ocasiones posteriormente. En la Tabla 5.5, se muestran los puntajes obtenidos a mayor y menor nivel de agregación para las primeras ocupaciones de la CIUO-68.

Tabla 5.5: Puntajes del ISEI de las primeras ocupaciones de la CIUO-68 (selección de casos).

Nombre de las ocupaciones

Gran grupo

Grupo menor

Grupo unitario

0/1000

Profesionales, técnicos y trabajadores relacionados

67

0100

CIENTÍFICOS DE LA FÍSICA Y TÉCNICOS RELACIONADOS

62

0100

Químicos

73

0120

Físicos

79

0130

Otros científicos físicos

79

0140

Técnicos en ciencias de la física

47

0200

ARQUITECTOS E INGENIEROS

71

0210

Arquitectos

77

0220

Ingenieros civiles

73

0230

Ingenieros eléctricos y electrónicos

69

0240

Ingenieros mecánicos

68

0250

Ingenieros químicos

73

0260

Metalúrgicos

70

0270

Ingenieros en minas

65

0280

Ingenieros industriales

65

0290

Otros ingenieros

76

0300

TÉCNICOS - INGENIEROS

53

0310

Topógrafos

58

0320

Dibujantes

53

0330

Técnicos en ingeniería civil

50

0340

Técnicos en ingeniería electrónica y eléctrica

48

Fuente: elaboración propia en base a Ganzeboom, Treiman y de Graaf (1992)

Al igual que en el caso del esquema EGP, en la página de Harry Ganzeboom 8 puede encontrarse información y las sintaxis para SPSS de clasificación del ISEI y SIOPS partiendo de la CIUO-88. El paquete ocuppar para R también permite su construcción automática.

5.2.2 Esquemas nacionales

5.2.2.1 Propuesta de Germani

Gino Germani, además de ser reconocido como uno de los fundadores de la sociología académica argentina, fue uno de los pioneros en el estudio de las clases sociales a partir de información censal y de encuestas de hogares. Tal como señala Murmis (Germani, Germani, Mera, & Rebón, 2010) su enfoque ecléctico, estuvo influenciado tanto por la escuela marxista como por la funcionalista y por los estudios norteamericanos de estratificación social vinculados al análisis estadístico.

Centrándonos en sus libros y artículos más importantes (Germani, 1955, 1963, 2010) si bien su aproximación empírica a la cuestión se baso en el uso de esquemas de clases sociales, también ha utilizado escalas de nivel socio-económico (relevando diversos aspectos objetivos de la posición de los individuos) y escalas de prestigio. Sin embargo, aquí haremos un breve repaso de su propuesta de operacionalización de las clases sociales.

Para el autor, las clases sociales presentaban tres características centrales:

  • Eran formas de agrupación que tenían un rol central en el funcionamiento y organización de las sociedades;

  • no eran meras nominaciones científicas, sino que tenían una existencia sociológica real;

  • No podían explicarse únicamente a través de la información ocupacional, sino que deberían considerarse aspectos psicosociales y ligados al “tipo de existencia” de los individuos, aunque existan limitaciones en los datos para abordar dicha dimensión.

Asimismo, Germani señaló que su propuesta de operacionalización podía ser modificada y adaptada en el tiempo ya que era en vano buscar una discriminación neta de dichos agrupamientos debido a la complejidad de combinaciones entre criterios estructurales y psicosociales. Las clases, entonces, se definían a partir de un criterio espacial y probabilístico, es decir, como “zonas de la estructura social en la que cierta combinación de criterios se da con mayor frecuencia estadística” (Germani, 1955, p. 143).

Respecto al esquema de clasificación propuesto por el autor, el mismo recurre a “la convencional clasificación tripartita” de clase alta, media y popular (1955, p. 146). La clase alta, debido a su bajo peso poblacional, es incluida dentro de las clases medias. Asimismo, tanto las clases populares como las clases medias son desagregadas según sector de actividad (sector urbano y sector rural) y de acuerdo a su estatus ocupacional (trabajadores dependientes e independientes) (1955, pp. 146–147). La frontera entre ambas clases se basaba en la distinción manual / no manual del trabajo, existiendo una amplia heterogeneidad dentro de cada agregado —Tabla 5.6—.

Tabla 5.6: Esquema de clases de Gino Germani (1955)

Categorías de ocupación

Clases sociales

Obreros y aprendices

Clases Populares

Trabajadores a domicilio y cuenta propia

DEPENDIENTES

Clases medias (y alta)

Empleados, cadetes

Jubilados, pensionados

AUTÓNOMOS

Propietarios agropecuarios

Propietarios industriales

Propietarios comercio y servicios

Profesionales liberales

Rentistas

Fuente: elaboración propia en base a Germani (1955)

5.2.2.2 Propuesta de Torrado

En tanto continuadora de la tradición inaugurada por Germani, Torrado aportó un formato de medición específico para el análisis de la estructura de clases argentina. La propuesta de la autora tiene, al menos dos versiones operacionalizables: una primigenia, producto de su trabajo en colaboración con de Ipola (Ipola & Torrado, 1976) y una versión posterior, más acabada, que constituyó la base de su obra “Estructura social de la Argentina” (Torrado, 1992) y que fue resultado de diversas intentos de clasificación (CFI, 1988; Torrado & Rofman, 1988b).

En palabras de la autora, su propuesta de esquema de clases mantenía un compromiso con tres de los principales enfoques de estratificación existentes: el “funcionalista”, que tiende a ofrecer una visión jerárquica de la estructura; el “materialista”, que define a las clases en función a las relaciones de producción y el “estadístico” o “pragmático” que hace hincapié en la utilización de categorías homogéneas que permitan comparabilidad de la información estadística (Torrado, 1998b).

Torrado acude a cinco variables que conformarán lo que podríamos denominar como el “esqueleto” de las clases sociales:

  • la ocupación;
  • la categoría ocupacional;
  • el sector de actividad;
  • el tamaño del establecimiento y
  • la rama de actividad.

Particularmente la ocupación, captada a partir de la CIUO-68, es re-clasificada para conformar nueve grupos de ocupación (GO) —Tabla 5.7—: 1) Empresarios, directores de empresas y funcionarios públicos superiores; 2) Propietarios de establecimientos; 3) Profesionales en función específica; 4) Técnicos, docentes y supervisores; 5) Empleados y vendedores; 6) Trabajadores especializados; 7) Trabajadores no especializados; 8) Empleados domésticos y 9) Sin especificar.

Tabla 5.7: Cruce de variables socio-ocupacionales y generación de estratos socales

Grupo de ocupación

Empleadores

Asalariados

Servicio doméstico

Cuenta propia y familiar sin remuneración

Sector privado

Sector privado

Sector privado

Sector privado

Sector público

Más de 5 ocupados

Hasta 5 ocupados

Más de 5 ocupados

Hasta 5 ocupados

1. Empresarios, directores de empresas y funcionarios públicos superiores

1.1

5.1

1.2

4.1.2

4.2

11

5.2

2. Propietarios de establecimientos

3

4.1.1

3. Profesionales en función específica

2.1.1

2.1.2

2.3.1

2.3.2

2.4

2.2

4. Técnicos, docentes y supervisores

3

5.1

4.1.1

4.1.2

4.2

5.2

5. Empleados y vendedores

6.1.1

6.1.2

6.2

6. Trabajadores especializados

8.1.1

8.1.2

8.2

7

7. Trabajadores no especializados

10

10

9.1.1

9.1.2

9.2

10

8. Empleados domésticos

11

11

11

11

11

11

9. Sin especificar

12

12

12

12

12

12

12

Fuente: elaboración propia en base a Torrado (1998)

De este modo, del entrecruzamiento de las distintas variables se genera una estratificación socio-ocupacional que presentamos a continuación —Tabla 5.8—, y que da lugar al clasificador de la Condición Socio-Ocupacional (CSO) en su versión desagregada.

Tabla 5.8: Nomenclador de la Condición Socio-Ocupacional desagregado

Nº identificador

Estrato socio-ocupacional

Siglas

1

DIRECTORES DE EMPRESAS

DIREC

1.1

Empleadores del sector privado en establecimientos con más de cinco ocupados

DIREC (ER - SPR. TE>5)

1.2

Asalariados del sector privado en establecimientos con más de cinco ocupados

DIREC (AS - SPR. TE>5)

2

PROFESIONALES EN FUNCIÓN ESPECÍFICA

PROF

2.1

Empleadores del sector privado

PROF (ER – SPR)

2.1.1

En establecimientos con más de cinco ocupados

PROF (ER- SPR. >5)

2.1.2

En establecimientos con hasta cinco ocupados

PROF (ER- SPR. <=5)

2.2

Cuenta propia

PROF (CP)

2.3

Asalariados del sector privado

PROF (AS-SPR)

2.3.1

En establecimientos con más de cinco ocupados

PROF (AS- SPR. >5)

2.3.2

En establecimientos con hasta cinco ocupados

PROF (AS- SPR. <=5)

2.4

Asalariados del sector público

PROF (AS- SPU)

3

PROPIETARIOS DE PEQUEÑAS EMPRESAS

PPE

4

CUADROS TÉCNICOS Y ASIMILADOS

TECN

4.1

Asalariados del sector privado

TECN (AS-SPR)

4.1.1

En establecimientos con más de cinco ocupados

TECN (AS -SPR. TE>5)

4.1.2

En establecimientos con hasta cinco ocupados

TECN (AS -SPR. TE<=5)

4.2

Asalariados del sector público

TECN (AS -SPU)

5

PEQUEÑOS PRODUCTORES AUTÓNOMOS

PPA

5.1

Empleadores del sector privado en establecimientos con hasta cinco ocupados

PPA (ER - SPR. TE <=5)

5.2

Cuenta propia

PPA (CP)

6

EMPLEADOS ADMINISTRATIVOS Y VENDEDORES

EAV

6.1

Asalariados del sector privado

EAV (AS-SPR)

6.1.1

En establecimientos con más de cinco ocupados

EAV (AS - SPR. TE>5)

6.1.2

En establecimientos con hasta cinco ocupados

EAV (AS - SPR. TE<=5)

6.2

Asalariados del sector público

EAV (AS - SPU)

7

TRABAJADORES ESPECIALIZADOS AUTÓNOMOS

TEA

8

OBREROS CALIFICADOS

OCAL

8.1

Asalariados del sector privado

OCAL (AS – SPR)

8.1.1

En establecimientos con más de cinco ocupados

OCAL (AS - SPR. TE>5)

8.1.2

En establecimientos con hasta cinco ocupados

OCAL (AS - SPR. TE<=5)

8.2

Asalariados del sector público

OCAL (AS - SPU)

9

OBREROS NO CALIFICADOS

ONCAL

9.1

Asalariados del sector privado

ONCAL (AS – SPR)

9.1.1

En establecimientos con más de cinco ocupados

ONCAL (AS - SPR. TE>5)

9.1.2

En establecimientos con hasta cinco ocupados

ONCAL (AS - SPR. TE<=5)

9.2

Asalariados del sector público

ONCAL (AS - SPU)

10

PEONES AUTÓNOMOS

TMARG

11

EMPLEADOS DOMÉSTICOS

EDOM

12

SIN ESPECIFICAR CSO

SESP

Fuente: Torrado (1998)

En su versión agregada el nomenclador discrimina once estratos socio-ocupacionales, mientras que en su versión desagregada, dichos estratos son subdivididos en función del sector de actividad y la categoría ocupacional. Mientras que la ocupación, la categoría ocupacional y el tamaño del establecimiento, permiten establecer diferenciaciones verticales en la estratificación (formando, según la autora, capas sociales), la rama y el sector de actividad, permite diferenciar a los estratos en términos horizontales, es decir, en fracciones de clase. Finalmente, el nomenclador puede ser agregado en tres clases sociales —Tabla @ref(tab: torrado3)—, definidas por la autora como clase alta, media y obrera, terminologías que “se relacionan más con la forma simbólica en que dichos colectivos existen en la cultura política argentina, que con una adhesión más explícita a algunas de las incontables teorizaciones existentes (…)” (Torrado, 1998b, p. 236).

Tabla 5.9: Sistema clasificatorio de la clase social

Clase social

Estratos sociales

Estratos sociales

Clase alta

-

Directores de empresa

Clase media

Autónomos

Profesionales en función específica

Propietarios de pequeñas empresas

Pequeños productores autónomos

Asalariados

Profesionales en función específica

Cuadros técnicos y asimilados

Empleados administrativos y vendedores

Clase obrera

Autónomos

Trabajadores especializados autónomos

Asalariados

Obreros calificados

Obreros no calificados

Marginales

Peones autónomos

Empleados domésticos

Fuente: elaboración propia en base a Torrado (1998)


  1. https://doi.org/10.1080/14616690701336518↩︎

  2. http://www.harryganzeboom.nl/isco88/index.htm↩︎

  3. La propuesta de operacionalización del enfoque de posiciones contradictorias puede encontrarse en Wright (1979).↩︎

  4. Una revisión de los items relevados por Wright para la construcción de sus indicadores específicos que constituyen su tipología de clases, pueden encontrarse en Wright (1994, pp. 331–345)↩︎

  5. http://www.harryganzeboom.nl/isco08/↩︎